El filósofo y psicoanalista Sigmund Freud llegó a mencionar que los sueños eran el puente para la psicología, es decir, que usando técnicas para recordar los sueños como la expresión del subconsciente, los pacientes podían descubrir los componentes mentales de su mundo onírico.

Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones los individuos no saben cómo recordar sus sueños y terminan por exponer una interpretación errónea de lo que se soñó; afortunadamente, los ámbitos del interés neuropsicológico han mejorado con el paso del tiempo, permitiendo que los exámenes psicológicos analicen al sueño como una serie de fenómenos psíquicos anormales.

El no saber cómo recordar los sueños es algo totalmente normal, ya que la mayoría de las personas solo se enfocan en descansar y despertar llenos de energía para afrontar el día siguiente.

Esta es una cuestión importante, pues al recordar los sueños es posible abrir una puerta al subconsciente en donde se pueden dar a conocer una serie de fenómenos psíquicos anormales, como las fobias histéricas o las formaciones obsesivas y delirantes, las cuales pueden ser analizadas por un médico especialista para un tratamiento específico.

El no recordar cada uno de los sueños que se presentan durante el descanso no provoca ningún malestar, pero puede ser de gran ayuda para saber lo que nos aqueja, para ello existen diversas estrategias que puedes implementar cuando no tengas idea de qué hacer para recordar los sueños.

¿Por qué es difícil recordar los sueños?

Es normal que la comunidad científica y las propias personas se pregunten por qué no se puede hacer memoria de los sueños, pues bien, la respuesta a esta cuestión proviene de la misma persona que las interpretó.

Sigmund Freud señalaba que cuando no se podía recordar un sueño, era debido a que se estaban reprimiendo las emociones y sentimientos; lo que se siente y se llega a vivir está estrechamente relacionado con lo que se sueña, es decir, cuando pasamos por situaciones difíciles y conscientemente las evadimos, los sueños hacen la representación de lo que está ocurriendo, olvidándolo al despertar.

En otras palabras, el no acordarnos de nuestros sueños puede interpretarse como un mecanismo de defensa inconsciente, el cual se encarga de protegernos de todo aquello que nos cuesta aceptar.

Si aún te preguntas “¿por qué no puedo recordar mis sueños?” y estás interesado en comenzar a tener más lucidez de lo que sueñas, las terapias psicológicas podrían ayudarte a desenmascarar lo que se oculta detrás del olvido.

¿Qué significa recordar tus sueños?

El mundo onírico es aún un terreno que sorprende al mundo y a la comunidad científica, en los últimos años han surgido estudios que logran responder algunas cuestiones, entre ellas la de por qué a veces los sueños se recuerdan con gran claridad y en otras ocasiones no se conserva ningún recuerdo de ellos.

Se tiene registro que una de las últimas regiones del cuerpo en disminuir su actividad al dormir es el cerebro en la parte del hipocampo, una zona cerebral inserta dentro del lóbulo temporal a través de cada corteza cerebral y cuya función principal es apoyar al sistema límbico; es aquí donde se encuentran algunos estímulos importantes, como la memoria a largo plazo, las emociones y el estímulo olfativo.

Al ser el último órgano en descansar, también es el último en despertar, lo que ocasiona que no se recuerde nada de lo que se soñó durante la noche; pero entonces ¿cuál es el significado de recordar los sueños?

Se dice que las personas que tienen la capacidad de recrear en su mente lo que soñaron tienen mayor actividad en el área temporoparietal del cerebro, la atención que una persona presta a sus estímulos externos está relacionada con el número de veces que se despiertan durante el sueño.

Por lo tanto, se puede decir que es bueno recordar los sueños, ya que esto significa que se está teniendo un descanso reparador y que no hay nada que esté perturbando nuestra mente.

Trucos para recordar los sueños

A pesar de que existen muchas formas para recordar los sueños, hay algunas técnicas que los propios científicos avalan para recordar cada uno de los sueños que se tienen, o que al menos son útiles para tener más detalles del mundo onírico.

A continuación, te presentamos algunos consejos que puedes seguir con el propósito de recordar lo que sueñas:

  • Dormir bien es igual a un descanso reparador, por ende, se tiene más lucidez.
  • Establecer un horario para descansar permitirá tener un sueño más claro.
  • Cenar muy pesado antes de dormir ocasiona trastornos del sueño.
  • Irse a la cama lo más tranquilo posible permite a la mente descansar inmediatamente.
  • Es recomendable dormir en un espacio cómodo y sin distracciones que puedan interrumpir el sueño.

Al poner en práctica estos ejercicios para recordar los sueños también podrás obtener un buen descanso y despertar con mucho más ánimo.