Con la llegada del verano y el aumento de las altas temperaturas, el descanso puede convertirse en un desafío, lo que hace que despertemos de manera frecuente o nos sintamos incómodos. Por eso, en este blog, explicaremos los consejos para mejorar el sueño en épocas de calor que pueden ayudarte a dormir bien incluso en las noches más calurosas.

El impacto del calor en la calidad del sueño

Disminución de la calidad del sueño REM

El calor interfiere con el sueño REM, una fase crucial para la consolidación de la memoria y el equilibrio emocional. La falta de frescura ambiental provoca interrupciones en esta etapa, lo que deja al cuerpo con sensación de cansancio y desorientación al despertar.

Sensación de claustrofobia y ansiedad

Este factor genera una percepción de incomodidad generalizada que puede derivar en sensaciones de claustrofobia o ansiedad nocturna que activan el sistema nervioso simpático y complica aún más la conciliación de un sueño profundo.

Mayor frecuencia de movimientos nocturnos

Cuando el cuerpo no logra mantenerse fresco, se incrementa la necesidad de cambiar de posición de forma recurrente en busca de comodidad, estos movimientos interrumpen las fases del descanso y aumentan la probabilidad de despertarse.

Consecuencias a largo plazo

  • Fatiga crónica. La falta de relajación acumulada reduce la energía durante el día.
  • Problemas de concentración. Dificultades para mantener la atención en tareas cotidianas.
  • Afectación del sistema inmunológico. Menor capacidad del cuerpo para combatir enfermedades.

¿Cómo elegir una almohada fresca para el verano?

Las almohadas son un elemento esencial para garantizar una recuperación de calidad, ya que proporcionan el soporte necesario para el cuello y la cabeza, manteniendo una alineación adecuada con la columna vertebral. Sin embargo, en épocas cálidas, su función va más allá del confort, convirtiéndose en una herramienta clave para evitar el sobrecalentamiento durante el descanso.

Es en este contexto, las almohadas Sognare® sobresalen al ofrecer una solución que combina innovación con un diseño orientado al bienestar. Gracias a sus materiales avanzados y su enfoque en la termorregulación, están diseñadas para responder a las necesidades específicas de este problema.

La almohada Sognare® Fussion incorpora la avanzada tecnología Microfussion®, que combina tres tipos de microfibras de gel (huecas, sólidas y en espiral). Este diseño garantiza una frescura constante, ideal para el verano. Además, su estructura mantiene la forma intacta, esto evita deformaciones y proporciona un soporte uniforme en cualquier posición de reposo.

Por otro lado, la almohada Sognare® Biocalyptus destaca por su composición a base de fibras naturales de eucalipto, que no solo poseen propiedades antibacterianas, sino que también ofrecen una excelente transpirabilidad. Esto la convierte en una opción ideal para quienes experimentan calor extremo durante la noche.

Finalmente, la almohada Sognare® Collezione combina materiales premium que brindan un balance perfecto entre lujo y funcionalidad. Este modelo proporciona un soporte superior y una sensación de frescura excepcional, incluso en las noches más cálidas. Su diseño sofisticado no sólo aporta comodidad, también estilo y elegancia.

Opciones de colchones para dormir en climas cálidos

El Colchón Sognare® Sense está diseñado para proporcionar un descanso fresco y cómodo, gracias a su capa superior de Proactive Foam con microfibras de gel, que regula la temperatura corporal.Además, cuenta con 868 válvulas independientes que se adaptan a los movimientos del cuerpo, lo que mejora el confort durante la noche.

Sus paneles hiperelásticos Gel Motion complementan estas características al dispersar las temperaturas extremas y ofrecer una superficie fresca y agradable al acostarnos. Todo esto lo convierte en una opción ideal al combinar soporte ergonómico y tecnología termorreguladora en un solo producto.

Consejos para mantener la habitación fresca durante la noche

Optimiza el uso de ventiladores y aire acondicionado.

Si utilizas ventiladores, coloca un recipiente con agua fría o incluso hielo frente a ellos; este truco sencillo genera un flujo que puede enfriar el ambiente. Por otra parte, si dispones de aire acondicionado, ajústalo a una temperatura moderada para evitar enfriamientos excesivos y reducir el consumo energético.

Gestiona la entrada de luz solar

Durante el día, mantén cerradas las persianas, cortinas o utiliza productos térmicos para bloquear los rayos del sol, que aumentan la temperatura ideal del interior. Al anochecer, abre las ventanas para permitir la entrada de aire fresco.

Selecciona ropa de cama adecuada

Opta por textiles ligeros y transpirables, como sábanas de algodón o lino, estas fibras naturales permiten una mejor circulación, evitando la acumulación de calor corporal y humedad. Además, evita las mantas gruesas y utiliza solo una colcha ligera si es necesario.

Minimiza fuentes internas de calor

Apaga dispositivos electrónicos como laptops, cargadores o luces innecesarias antes del reposo, ya que contribuye a elevar la temperatura ambiental del cuarto y el insomnio. Incluso cambiar las bombillas tradicionales por LED puede ser una buena opción.

Refresca tu cuerpo antes de acostarte

Tomar una ducha tibia ayuda a reducir la temperatura corporal y facilita la relajación necesaria para conciliar el sueño nocturno, si es persistente, puedes mantener una toalla húmeda cerca para refrescarte durante la noche.

Crea una atmósfera tranquila y ventilada

Complementa estos consejos con el uso de plantas naturales como el aloe vera o la sansevieria, que contribuyen a purificar el aire y mejorar la sensación de frescura en el espacio.

Otros accesorios para mejorar el sueño en climas cálidos

  • Protectores de colchón transpirables. Ayudan a evitar la acumulación de sudoración nocturna y sofocación en el colchón.
  • Cojines refrescantes. Diseñados con gel frío, estos cojines son ideales para mantener la cabeza fresca.
  • Cortinas térmicas. Reducen el aumento térmico en la habitación y mejoran la calidad del sueño.

Errores comunes al intentar dormir en épocas de calor

1. Uso incorrecto de ventiladores

Dirigir el flujo de aire hacia el cuerpo puede parecer una solución efectiva, pero a largo plazo puede generar problemas como sequedad en la piel y vías respiratorias, o incluso dolores musculares debido a la exposición prolongada al aire frío.

2. Apertura inadecuada de ventanas

Muchas personas abren las ventanas durante las primeras horas del día para ventilar el espacio, pero sí la sensación térmica exterior es más alta que la interior, esto sólo empeorará el ambiente. Es mejor mantener las ventanas cerradas y usar cortinas opacas o térmicas para bloquear los rayos del sol.

3. Uso de ropa de cama inadecuada

Las mantas gruesas y materiales sintéticos dificultan la regulación de la temperatura corporal y retienen el aire caliente, opta por ropa de cama ligera y de fibras naturales, como algodón o lino.

Dormir bien en verano es posible si tomas las medidas correctas y sabes elegir productos diseñados para esto, que marcará una gran diferencia en tu pausa nocturna para quienes buscan combatir los efectos del calor en el sueño.

Recuerda que el descanso reparador es fundamental para tu salud mental y bienestar, haz los cambios necesarios en tu habitación y disfruta de noches frescas y un sueño reparador incluso en las épocas más calurosas del año.