En muchas ocasiones, aunque hayamos descansado lo suficiente nos despertamos con mucho sueño y cansancio, sintiéndonos con gran fatiga y sin energía, dificultando y entorpeciendo nuestras tareas y actividades durante el resto del día sin explicación alguna ¿te ha pasado?
Bueno, en muchas ocasiones se trata de algo normal, la mayoría de los niños, adolescentes, adultos y personas mayores experimentan estos episodios de extremo cansancio con regularidad; no obstante, hay que prestar atención de que tan seguido se presentan porque puede ser signo de una enfermedad.
Cansancio y sueño
El cansancio o sueño consigue presentarse de diferente manera en cada persona, inclusive en distintos horarios, como una vez que despertamos, por las tardes o antes de ir a dormir, lo importante es identificar qué es el causante de estas sensaciones.
Entre los principales síntomas de sueño y cansancio, nos encontramos con la somnolencia, que es la necesidad de dormir y descansar, la sensación de falta de energía o fuerza, problemas de memoria y concentración, insomnio, asimismo mareos o hasta depresión y ansiedad.
Causas de sueño excesivo y cansancio
El cansancio y sueño excesivo llega a deberse a diferentes causas, muchas en relación con el estilo de vida que se lleva, desde las horas que dormimos, nuestra alimentación, sufrir de estrés y depresión, padecer de algunos trastornos del sueño como la apnea o de alguna patología, que te describiremos a continuación:
Sedentarismo
Llevar una vida poco activa es una de las principales causas del sueño y cansancio, está comprobado que las personas que llevan una vida sedentaria y no practican algún tipo de ejercicio se sienten agotadas la mayor parte del tiempo, sumado a que son más propensas a sufrir de enfermedades.
Todo lo contrario de aquellas personas que, si incluyen alguna actividad a sus rutinas, sintiéndose más activos y con mayores niveles de energía reduciendo significativamente la fatiga y la somnolencia, además que es excelente para preservar la salud.
Falta de sueño
No dormir las horas que el cuerpo necesita, que van desde las 7 a 8 horas promueve el cansancio y sueño excesivo, haciendo que uno se sienta lento y desorientado durante todo el día, además que merma la salud de las personas, provocando cambios de humor, enfermedades del corazón, obesidad o accidentes cerebrovasculares.
Alimentación
No consumir los suficientes alimentos o carbohidratos ocasiona agotamiento, ralentiza tu metabolismo sin lograr conservar la energía que se requiere, ya que el cuerpo necesita que se coma lo suficiente para producir energía y consigas que tu cuerpo se mueva.
Asimismo, la falta de consumo de proteína hace que las personas se sientan débiles, ya que esta aumenta significativamente el metabolismo. Para prevenir la fatiga existen vitaminas para el sueño y cansancio, compensando aquellas grasas, proteínas y carbohidratos que nos hace falta consumir.
Hidratación
Con lo que hacemos diariamente, con actividades y demás, perdemos grandes cantidades de agua, deshidratando el cuerpo mediante el sudor, la respiración y la orina, que claro, es necesario sustituir, consumiendo este vital líquido todos los días.
La deshidratación se llega a presentar y confundir como simple cansancio físico y sueño, por lo que tomar la cantidad suficiente de agua es fundamental, no solo para combatir el agotamiento, sino para mejorar el funcionamiento de la mayoría de nuestros órganos.
La diabetes da sueño y cansancio
Ahora veamos aquellas enfermedades que entre sus principales síntomas se encuentra la somnolencia y el cansancio, un claro ejemplo es la diabetes, que muchas personas ni siquiera saben que la padecen.
Sus demás síntomas aparecen gradualmente, puesto que, si se notan otros signos como mucha sed, hormigueo en manos y pies, pérdida de peso, aumento del apetito, visión borrosa, frecuentes lesiones e infecciones, además de la fatiga y querer dormir la mayoría del tiempo, se podría estar tratando de diabetes, lo mejor es que consultes a un médico.
El estrés produce sueño y cansancio
El cuerpo reacciona naturalmente produciendo la sensación de sueño y cansancio ante la presencia de emociones fuertes como lo es el estrés, ansiedad y depresión, además, que cuando las personas son sometidas a estas sensaciones la calidad del sueño se ve afectada sin que duerman lo suficiente. Si es algo que se vive constantemente lo más recomendable es visitar a un psicólogo para comenzar a trabajar en ellas.
El COVID da sueño y cansancio
Como sabemos la reciente pandemia por COVID-19 trajo mucha incertidumbre acerca de sus síntomas y secuelas al ser una nueva enfermedad; sin embargo, la mayoría de los contagiados presentaron fatiga, sueño y agotamiento, durante y aun después de haberse curado, permaneciendo incluso por meses.
Si alguna de las causas antes mencionadas te suena familiar en tu caso, es momento de que tomes acciones e inicies a combatir ese cansancio y sueño que padeces con frecuencia, para que de esta manera mejores tu calidad de vida y que realizar tus pendientes diarios no te sea casi imposible.