La acción de dormir es necesaria para la supervivencia y para un buen estado de salud, ya que no solamente permite al cerebro consolidar la memoria, sino que mejora la concentración, el estado de ánimo, es un escudo contra enfermedades cardíacas y regula las hormonas del crecimiento.
Pero, conforme va pasando el tiempo, es normal que exista una alteración del sueño y una interrupción del descanso que termina por aumentar el riesgo vascular y la esperanza de vida.
Los bebés, a diferencia de los adultos, suelen dormir mucho más tiempo, debido a que una persona mayor no necesita crear nuevas conexiones neuronales, no obstante, eso no significa que no se vea perjudicada cuando hay una reducción del descanso, lo que nos lleva a realizarnos la siguiente pregunta: ¿Por qué dormir por mucho más tiempo es malo?
Al dormir se requiere que el descanso sea de calidad, es decir, el sueño debe completarse entre 7-8 horas, menos de 6 horas representa un riesgo para la salud a largo plazo; por otro lado, dormir mucho también es malo y puede ser un trastorno conocido como hipersomnia, donde la persona duerme más tiempo del que necesita para recuperarse.
Tanto la reducción como el aumento de las horas al dormir afectan la función vital del sueño, pero entonces, ¿Por qué es malo dormir mucho? Aunque suene contradictorio, cuando se sobrepasa el número de horas que una persona adulta debe descansar, las funciones del organismo colapsan y los procesos metabólicos e inmunológicos se alteran.
Dormir mucho tiempo es malo para el sistema nervioso, pues las funciones vitales no se recuperan cuando se excede el tiempo y se entra a un sueño ligero, que no es ni constante ni reparador.
Por lo tanto, el dormir mucho es malo y resulta bastante nocivo, pudiendo incidir directamente en el estado de ánimo, ocasionar alteraciones en las emociones e incluso dar paso a un cuadro de depresión.
A pesar de lo anteriormente mencionado, son muchas las personas que aún se preguntan “¿Dormir mucho es malo o es bueno?”, lo que afecta en sí es la cantidad de horas que se descansa, y cuando se lleva a los extremos se ocasiona un desequilibrio energético y molecular, afectando las funciones de la psique.
¿Es malo dormir mucho durante el embarazo?
Cuando se tiene un sueño de calidad, se debe a que hubo condiciones naturales que permitieron que las horas descanso se concluyeran sin interrupciones, pero cuando se sobrepasan las horas de sueño, es decir, más de 8 horas, se elevan los niveles de azúcar en la sangre, causando que la producción metabólica se transforme en problemas de peso, como la obesidad.
Son muchos los factores que tienen repercusión directa en el sueño de las personas, sin embargo, este problema puede ser más grave durante la etapa de gestación, por lo que es importante responder a la pregunta: ¿Es malo dormir mucho estando embarazada?
Dormir puede llegar a ser una tarea complicada de realizar durante el embarazo, ya que es más difícil tener un descanso completo a medida que se avanza en esta etapa; es normal que durante el día, la mujer se encuentre agotada y sobrepase las horas de sueño que están recomendadas para un adulto.
Dormir mucho en el embarazo es malo porque al cuerpo se le proporcionan más horas de las necesarias, causando que el metabolismo y la producción de hormonas tengan una alteración mucho mayor a la que se suele presentar en esta etapa.
El cansancio excesivo es una de las principales consecuencias de dormir mucho en el embarazo, por ello se dice que es malo sumar más horas de descanso, pues este tipo de fatiga se suma al agotamiento que produce la progesterona y se acrecienta al pasar el tercer trimestre, en donde el peso y el movimiento del bebé resultan más incómodos para la futura madre.
Entre 8 y 12 horas es lo que normalmente se duerme al final del embarazo, ya que en esta etapa el sueño es mucho mayor, ocasionando que la mujer esté somnolienta durante todo el día y con el nivel de alerta y de atención disminuidos.
Sin embargo, estudios recientes han mencionado que puede existir una relación entre el dormir de más durante el embarazo y la muerte fetal, aunque los resultados de estos aún no son concluyentes.
En dichos análisis, se apunta que es malo dormir mucho en las últimas semanas de embarazo porque supone un riesgo tanto para la madre como para el bebé, debido a que estar mucho tiempo acostada puede ocasionar la salida de un coágulo sanguíneo en una vena profunda, la disminución de la masa ósea, y el descondicionamiento muscular y cardiovascular.
Las consecuencias de dormir más de lo que se debe varían en gravedad según los hábitos de la persona, procura definir una rutina para tu descanso con la intención de no provocar alteraciones en tu organismo.