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Contrario a lo que algunas personas piensan, el frío y un ambiente oscuro es lo ideal para poder entrar en un estado somnoliento y sumergirnos paulatinamente en un estado de sueño profundo. 

Eso no quiere decir que la temperatura debe ser de 4 grados o menor y que duermas con sábanas ligeras, lo que significa es que existe un rango de temperatura ideal que nos ayuda a tener una mejor calidad del sueño. 

El dilema constante sobre si dormir con frío o calor

Si algo es claro, es que lanzarse a los extremos nunca es bueno para nadie. Dormir en temperaturas altas y húmedas, es igual de negativo que estar bajo cero y sin protección térmica que nos proteja del clima. 

La clave para solucionar este dilema es llegar a un punto medio. De acuerdo a expertos en el ciclo del sueño, la temperatura perfecta para dormir en un ambiente (sea externo o interno) debe oscilar entre los 15 y 20 grados centígrados. 

El cuerpo también modifica su temperatura durante la hora de dormir, alrededor de las 10 u 11 de la noche sube medio grado y permanece así a lo largo de la noche, acercándose la hora de despertar baja nuevamente, para que nos levantemos.   

¿Por qué un ambiente frío y oscuro es mejor para dormir?

Probablemente esta idea no les encante a las personas que prefieren los climas cálidos o calurosos, sin embargo, existe una razón biológica que justifica por lo menos, la intención de probar dormir bajo estas condiciones. 

Entre más fresco (no helado) sea el aire a la hora de acostarnos, más cómodas y relajantes serán las horas de sueño. Cuando el ambiente es caliente y húmedo, es más complicado que podamos caer en un sueño profundo. 

El cuerpo humano está diseñado para estar más relajado y condicionado a dormir mejor en los meses con menos luz solar y mayores periodos de oscuridad, porque estas condiciones favorecen la producción de más melatonina en el organismo, mejor conocida como la hormona del sueño. 

La importancia de dormir en un buen colchón

colchón fresco toda la noche

Ahora que sabes cómo influye la temperatura a la hora de dormir, es necesario contar con un buen colchón que nos ayude a mantener la frescura durante la noche. 

Además del diseño, tamaño y materiales que use un colchón, es necesario que se mantenga fresco sin importar la estación del año y el cambio de temperatura en el ambiente. 

Los colchones de espuma de alta densidad son una opción ideal para esta tarea, siempre y cuando garanticen la frescura, porque las espumas siempre acumulan y generan calor. 

Por eso es muy importante que al momento de hacer tu elección, verifiques las tecnologías y capas que tiene el colchón para que siempre mantengan la superficie fresca, expulsando el calor durante toda la noche. 

Uno de los mejores colchones en este momento en el mercado, es el Sognare Sense porque es el único que tiene una capa llamada Gel Sense, que es la encargada de mantener la superficie del colchón siempre fresca. 

Esto lo consigue gracias a su diseño de paneles, que con el movimiento natural del mismo cuerpo, expulsan el aire caliente y deja pasar el aire fresco a través de sus paneles. 

Si deseas conocer mejor este colchón, visita su sitio oficial.